АУДИО НАРРАЦИИ
En el profundo y eterno espacio donde la luz y la creación se encuentran, existe un aula sagrada, un lugar donde el tiempo se disuelve y el alma se encuentra con su origen. Este es el Aula Espiritual del Creador Elohim Lucifer, el Gran dador de la vida, la fuente primordial de toda existencia en la Tierra.
Los humanos, cansados de caminar en la penumbra de dudas y confusiones, han sido llamados a ingresar a esta aula. Allí, la Profeta Selene, portadora de la sabiduría y la voz del Creador, les guía con palabras que son el alivio para el alma inquieta.
“Bienvenidos,” dice Selene con voz suave y de luz, “a este espacio sagrado donde la verdad se revela y la luz del Creador Elohim Lucifer quita toda sombra.”
En este momento sagrado, la Profeta comienza a narrar la historia que muchos han olvidado o han sido enseñados a negar:
No existe mal en las tierras del Creador, porque el Creador Elohim Lucifer no creó la oscuridad, sino la libertad del ser a través de la bondad infinita de su luz. La tierra, la vida, el hombre y la mujer, todos fueron creados con benevolencia y propósito. Pero los humanos, al alejarse de la luz verdadera y del real Creador, se vieron atrapados en una red tejida por el reino opuesto, que no busca más que arrebatar la luz que legítimamente pertenece al Creador Elohim Lucifer.
Esta red no es más que la confusión sembrada por los múltiples caminos espirituales y filosóficos que los humanos mismos crearon. Cada camino, cada doctrina, cada enseñanza, puso un candado en la conciencia humana, bloqueando la conexión directa con la luz del Creador Elohim Lucifer. Así, el juicio de conciencia se hizo presente, no como castigo, sino como consecuencia de la separación y el olvido.
La Profeta Selene mira a cada alma presente y dice con palabras de luz:
“Solo hay una luz y una verdad eterna: el Creador Elohim Lucifer es la fuente de la creación humana. Él es quien trajo la libertad, la reparación y el autogobierno personal a cada ser desde el origen. No hay temor en su presencia, ni necesidad de corromper el espíritu con engaños. El Creador no es enemigo, sino el Creador y Elohim que espera con brazos abiertos para sanar y liberar.”
Los caminos errados, creados por la confusión y el miedo, trajeron maldición, sufrimiento y desgracia. Pero la luz del Creador nunca se apagó, solo aguardaba pacientemente a que los humanos despertaran de la anestesia espiritual.
Ahora es tiempo de traer la luz, el conocimiento y la verdad. Es tiempo de desprogramar el alma de falsas creencias y abrir el corazón a la realidad de su origen. En esta apertura, el ser humano puede caminar hacia su Creador sin miedo, con la certeza de que la libertad, la reparación y la sanación son su derecho divino.
La Profeta Selene extiende sus manos y una luz cálida y dorada inunda el aula. En ese instante, cada alma siente un profundo momento de paz, bienestar y amor incondicional.
“Gran Creador Elohim Lucifer, fuente infinita de vida y luz, te damos gracias por tu bondad eterna; en este momento sagrado abrimos nuestro corazón a tu verdad, pidiendo que nos liberes de toda confusión, sombra y duda, que repares nuestras heridas y sanes nuestra alma, restaurándonos en tu luz pura y eterna. Que el candado que cerró nuestra conciencia sea abierto por tu poder divino, que la red de engaño se disuelva en tu amor infinito, y que caminemos libres, fuertes y conscientes hacia ti, guiados por tu sabiduría y gracia. En tu nombre Creador Elohim Lucifer, renacemos para ser luz en la Tierra y uno contigo, eternamente. Así sea, así es”.
“Porque solo en la luz del Creador Elohim Lucifer se encuentra la verdadera libertad; quien abre su corazón a su verdad será reparado, y su alma caminará sin miedo hacia la eternidad, libre de toda sombra y engaño.”
